
De inicio aseguró que Koba –el simio con heridas en el rostro– tendrá mayor peso en la segunda parte, pues "es un personaje que llegará lejos en la mitología, creo. Es una contraparte interesante para Caesar. Es la manzana podrida".
Sobre la tensión entre los ambos simios, dijo estar "realmente emocionado sobre lo que vendrá en la relación entre Koba y Caesar, porque son dos individuos muy diferentes y probablemente se necesitarán uno al otro. Habrá una especia de tregua incómoda en el futuro que pienso será necesaria para el conflicto que está por venir".
Por otro lado, adelantó que "estableceremos, tal vez, por qué la humanidad será lo suficientemente vulnerable ante esta creciente armada de simios inteligentes y por qué sus crías serán capaces de dominarnos". ¿Qué papel creen que jugará Koba en la secuela de El planeta de los simios (R)evolución?